Por Rosa Mª Laviña Bellido, secretaria y Patrona Fundación Pedro Zerolo
El 22 de julio es el Día Europeo de las Víctimas de los Delitos de Odio, en conmemoración del 22 de julio de 2011, día de los atentados de Oslo y Utoya, en Noruega. La gran mayoría de los muertos ese día eran jóvenes ya que se encontraban en un campamento juvenil político del Partido Laborista Noruego donde al día siguiente iba a participar el primer ministro con las juventudes de su partido. Ese día de 2011 un fanático fundamentalista contrario al multiculturalismo acabó con la vida en Oslo y Utoya de 77 personas. ¡No olvidamos!.
En la Fundación Pedro Zerolo creemos que es alarmante el aumento de un 21.35% de los delitos e incidentes de odio en España, según se desprende del Informe sobre delitos de odio de 2023 dado a conocer por el Ministerio del Interior, lo que confirma la tendencia alcista.
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han registrado en el año 2023 un total de 2.268 delitos, de los cuales podemos destacar que:
- 856 son delitos por racismo/xenofobia, un 13,38% más que en el 2022.
- 522 delitos basados en la orientación sexual e identidad de género de las víctimas, esto supone un 13,73% más respecto a las cifras del 2022.
- 352 hechos conocidos de delitos de odio por la ideología, lo que supone un aumento del 43,67% respecto al 2022.
Es alarmante conocer, a través de este informe, que los delitos de odio con mayor aumento han sido los “delitos de odio contra personas con discapacidad”, ya que han supuesto un 113,04% con 26 hechos conocidos más que el 2022.
Los crímenes de odio son actos violentos o discriminatorios dirigidos contra individuos o grupos debido a su identidad, como la etnia, el origen racial, la religión, la identidad sexual, la edad, el sinhogarismo, la enfermedad, el estado serológico o la discapacidad. Estos actos no solo dañan a las víctimas directas, sino que también socavan la cohesión social y amenazan los valores fundamentales de la democracia y los derechos humanos.
No nos olvidamos de que las redes sociales han transformado nuestra forma de comunicarnos, permitiendo conexiones instantáneas y la difusión rápida de información. Sin embargo, esta revolución digital también ha dado lugar a un fenómeno preocupante: el aumento de los delitos de odio en línea. Los discursos de odio son la antesala de los delitos de odio y por tanto hay que acabar y perseguir dichas manifestaciones, para ello la Fundación Pedro Zerolo aboga por un pacto contra los discursos de odio promovido por las principales entidades sociales contra la discriminación en nuestro país.
En Europa, aunque hemos avanzado en muchos aspectos, los crímenes de odio siguen siendo una preocupación persistente. Desde incidentes de violencia física hasta intimidación en línea, estas manifestaciones de odio pueden tener consecuencias profundas y duraderas. Es imperativo que tanto los gobiernos como la sociedad civil redoblen sus esfuerzos para prevenir estos actos y garantizar la justicia para las víctimas.
La educación desempeña un papel crucial en la lucha contra los crímenes de odio. Fomentar la empatía, la comprensión y el respeto desde una edad temprana puede ayudar a construir sociedades más inclusivas y solidarias. Además, es fundamental fortalecer las leyes y políticas que protegen a las minorías y grupos vulnerables, así como mejorar los mecanismos de denuncia y apoyo a las víctimas.
La colaboración internacional también es esencial. Los crímenes de odio no conocen fronteras, y la cooperación entre países europeos para intercambiar mejores prácticas y datos puede fortalecer nuestra respuesta colectiva. La sensibilización pública y la promoción de una cultura de respeto son igualmente importantes para cambiar actitudes y comportamientos.
En este Día Europeo contra los Crímenes de Odio, la Fundación Pedro Zerolo renueva su compromiso con los principios de igualdad y dignidad para todos. Cada uno de nosotros tiene un papel que desempeñar en la construcción de un futuro donde el odio y la intolerancia sean cosa del pasado. Juntos, podemos crear comunidades donde la diversidad sea celebrada y donde todos puedan vivir libres de miedo y discriminación.
La presidenta de la Fundación Pedro Zerolo, Luisa Estévez afirma que “es nuestra obligación hacer realidad la visión de una Europa verdaderamente inclusiva y justa para todos sus ciudadanos. La lucha contra los crímenes de odio es una responsabilidad compartida que nos concierne a todos”.